El Hotel Balneario Baños da Brea puede presumir de las bondades de sus aguas mineromedicinales y  también de un entorno único. Nuestras instalaciones se encuentran en un enclave natural que permitirán a nuestros huéspedes disfrutar del bienestar de nuestras aguas y de la belleza de cinco -¡y muchos más!- puntos turísticos que proponemos en esta nueva entrada.

Área recreativa e ponte da Carixa

Bañada por el río Deza, en Merza, el área recreativa de A Carixa, atrae a multitud de visitantes durante todo el período estival. Y no es para menos, ya que los veraneantes pueden disfrutar de parque infantil, mesas, chiringuito, piscina, zona ajardinada y también de las aguas, embravecidas por tramos, del Deza. De hecho, sirvió a los antepasados para la construcción de molinos. Merza sustenta cinco molinos reconstruidos por situarse en esta zona privilegiada.

A escasos metros del área recreativa, se encuentra un curioso puente, del que existen tan solo los restos de un solo arco. Aunque de posible origen medieval, lo que vemos hoy es la obra inacabada de Manuel Sueiro Ramos, data del 1928, quien posiblemente hubiese inteantado reconstruir el anterior.

Poblado minero de Fontao

En los años 40 del siglo pasado, Fontao, en Vila de Cruces fue el epicentro de exportación de wolframio, un mineral muy codiciado y utilizado para blindar cañones durante la II Guerra Mundial y la Guerra de Corea. 

Alrededor de las minas del wolframio se construyó un poblado que daba posada a todos los trabajadores y sus familias. Con el fin de la guerra, las explotaciones fueron cesando su actividad hasta darse por finalizada en los años setenta.

Después de décadas en desuso, el complejo minero sufrió una rehabilitación en la que se recuperó la zona del poblado para viviendas sociales, manteniendo su estructura original. Por otro lado, en esta localización se encuentra el Museo de la Minería -los edificios destinados a la exposición son la antigua capilla y las escuelas-, para cuya visita es necesaria la previa reserva. Además, Fontao cuenta con un auditorio con capacidad de 170 butacas.

Mosteiro de Carboeiro y Fervenza do Toxa

El Mosteiro de San Lourenzo de Carboeiro fue fundado en el siglo X por el conde Gonzalo y su esposa Teresa. Este monasterio benedictino alcanzó su apogeo en los siglos XII y XIII, durante la época románica. Con el paso del tiempo, el monasterio sufrió diversas vicisitudes, incluyendo la decadencia a partir del siglo XV y la desamortización en el siglo XIX, que llevó al abandono y deterioro de sus estructuras.

Si seguimos una hermosa ruta del Mosteiro de Carboeiro, podremos llegar hasta la Fervenza do Toxa, con una caída libre que supera los 30 metros, convirtiéndose en la mayor cascada de Galicia.

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